Estados Unidos registró 532 muertes por coronavirus en las últimas 24 horas, el balance más bajo desde fines de marzo

El número de infectados, en tanto, llegó a 1.662.375, según datos de la Universidad Johns Hopkins. La cifra de decesos por COVID-19 en el país asciende a 98.218.

Estados Unidos reportó este lunes 532 nuevas muertes por coronavirus en las últimas 24 horas, el balance más bajo desde el 29 de marzo, de acuerdo a datos aportados por la Universidad Johns Hopkins. De esta manera, la cifra de decesos por COVID-19 en el país asciende a 98.218. En tanto, el número de infectados llegó a 1.662.375.

Estados Unidos se mantiene como el país más afectado por la pandemia. Es la nación con números más altos, tanto en muertos como infectados. Según las estadísticas de la Universidad de Baltimore, Brasil es el segundo con más contagios (374.898).

En medio del alarmante avance del virus en el país sudamericano, considerado nuevo epicentro de la pandemia, Donald Trump firmó este domingo la prohibición de viajes a Estados Unidos desde Brasil. Inicialmente la medida empezaría a regir a partir del próximo jueves. Sin embargo, el Gobierno norteamericano adelantó para este martes su puesta en vigor.

La decisión, firmada por el presidente norteamericano, modifica la fecha de vigencia de la “suspensión de entrada como inmigrantes y no inmigrantes de ciertas personas adicionales que representan un riesgo de transmitir el nuevo coronavirus 2019”, dada a conocer este domingo, así como otras disposiciones generales.

“Esta proclamación es efectiva a las 11.59 pm, hora del este, el 26 de mayo de 2020”, señala la enmienda, que precisa que no aplica para las personas a bordo de un vuelo hacia Estados Unidos que haya partido de ese país antes de esa hora.

El anuncio hecho este domingo establecía que la prohibición se haría efectiva a partir de las 23.59 hora local de Washington (03.59 GMT) del próximo 28 de mayo y permanecerá vigente hasta que el presidente la rescinda.

La prohibición no afecta a ciudadanos estadounidenses y a residentes permanentes legales en el país, así como a otras personas que cumplan algunas de las excepciones previstas por el Gobierno de Trump.